La miopía está considerada como la pandemia del siglo XXI por el gran aumento en su prevalencia en los últimos años, siendo actualmente un problema de salud pública mundial.
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Prevalencia de la miopía en el mundo
La prevalencia de la miopía no es uniforme en las distintas partes del mundo, siendo significativamente mayor en las comunidades asiáticas, sobrepasando el 80% en algunas poblaciones urbanas, mientras que en regiones rurales del mismo continente no supera el 5%.
Esto evidencia que además de los factores geográficos o raciales, existen otros factores denominados ambientales y educacionales que también influyen en la tendencia miópica a nivel global.
En 2018 fue presentado por el Presidente de Visión y Vida, D.Salvador Alsina, el Informe “Prevalencia de la miopía en los jóvenes en España, 2018”.
- 6 de cada 10 jóvenes de entre 17 y 27 años son miopes en España.
- La generación de Nativos Digitales (nacidos después del 2000) es más miope en graduación y desde más jóvenes.
- La prevalencia de miopía entre las mujeres es más alta.
- Una causa fundamental es el nuevo estilo de vida sedentario: 7 de cada 10 jóvenes está menos de una hora al día realizando actividades en el exterior y la mitad utiliza su móvil entre 4 y 8 horas al día. Menos de la mitad de ellos utilizan gafas de sol.
Factores de riesgo y progresión de la miopía
Una de las dudas más comunes es, cómo aparece y aumenta la miopía. En la actualidad, los factores ambientales, educacionales, profesionales, la raza y la procedencia geográfica han demostrado algún tipo de asociación con la aparición y aumento de la miopía.
Factores genéticos
La miopía débil se transmite de forma autosómica, pudiendo ser dominante o recesiva. La miopía alta o degenerativa se transmite de igual manera pero además también existe transmisión ligada al sexo y, en muchos casos, el grado de miopía de los hijos es superior al de los padres.
Se puede detectar por cuatro síntomas claves: antecedentes hereditarios, elongamiento del eje anteroposterior desde el nacimiento, lesiones de fondo de ojo y complicaciones visuales frecuentes.
Factores ambientales: educacionales y profesionales
Actualmente se ha constatado una correlación significativa entre la instauración y progresión de la miopía con la mayor exigencia educacional y profesional. Los hábitos visuales incorrectos y el sobreesfuerzo visual provoca un cansancio y estrés visual que, a la larga, puede desencadenar en miopía.
Gracias a diversos estudios se ha llegado a la conclusión de que no solo los factores raciales o genéticos explican las tendencias miópicas de las últimas décadas en ciertas zonas geográficas del planeta, sino que la explicación habrá que buscarla también en los factores ambientales donde el sujeto se desarrolla.
El exceso de enfoque como mecanismo causante de la progresión de la miopía
Una respuesta de enfoque errónea ha sido considerada como una de las principales causas que podrían explicar la tendencia miópica de las generaciones más jóvenes, sujetas a elevados niveles de estrés visual durante la escolarización y vida laboral en visión próxima.
Se debe fundamentalmente a una elevada tensión de los músculos ciliares, que son los responsables de la acomodación del cristalino.
Esto produce un espasmo en dichos músculos, el cristalino se hace más convexo e incrementa su poder refractivo, lo que conlleva que, al querer mirar a lo lejos, no se produzca una relajación adecuada en ese enfoque y cause que cada vez haya que enfocar más en visión próxima y que a lo lejos se vea borroso, creándose así la condición miope.
Este hecho también se prueba por la mayor prevalencia de la miopía en poblaciones urbanas en relación a poblaciones rurales, en sociedades civilizadas frente a poblaciones indígenas o en ciertos colectivos ocupacionales.
Un atisbo de esperanza
Gracias a la gran preocupación que se está teniendo por el aumento descontrolado de la miopía en la sociedad actual, se han dado a conocer diversos métodos sobre los cuales hay infinitas investigaciones sobre su gran actuación frente a la prevención y el control de la miopía.
Por lo tanto se puede afirmar que la miopía llamada funcional, que aparece y se desarrolla mayoritariamente por los factores culturales y ambientales, es algo que se puede prevenir o controlar si se lleva a cabo un control exhaustivo desde la infancia.
