La Visión

La Visión

La visión comienza cuando la luz entra en el ojo a través de la córnea, el primer tejido transparente.

Seguidamente, los rayos atraviesan la pupila, la abertura redonda situada en el centro del iris, la parte coloreada del ojo.

El tamaño de la pupila varía en función de la cantidad de luz que entra en el ojo.

A continuación, los rayos atraviesan el cristalino que, modificando su forma, enfoca los rayos en función del objeto que se mira: es el punto focal del ojo.

Por último, la luz llega a la retina y su energía excita las células, creando un impulso nervioso que viaja a través del nervio óptico hasta el cerebro, donde se interpreta.

Agudeza visual

La agudeza visual, es la capacidad de distinguir los detalles. Se mide mediante el conocido test de las cartas. Los resultados se suelen dar sobre 6 (6/6, sistema métrico decimal) o 20 (20/20, sistema inglés).

Una agudeza visual de 6/12 (o 20/40) significa que necesita acercarse a 6 metros (o 20 pies) para ver algo que normalmente se ve a 12 metros (40 pies). Esta medida indica su capacidad para ver.

Miopía

Es el problema visual creado por el enfoque de la imagen delante de la retina, de modo que las imágenes se ven borrosas a distancia, pero siguen siendo claras de cerca. Entrecerrar los ojos para reducir la borrosidad es un signo frecuente de miopía.

Hipermetropía

Se trata de un problema visual creado por el enfoque de la imagen detrás de la retina, lo que significa que el ojo tiene que hacer un esfuerzo para ver tanto de lejos como de cerca, creando a veces fatiga visual o visión borrosa a ambas distancias. Los síntomas más comunes son dificultad para concentrarse y mantener una visión clara durante largos periodos al leer y escribir, fatiga o dolores de cabeza después de trabajar de cerca.

Astigmatismo

Se trata de un problema visual creado por un defecto en la curvatura de la córnea y/o el cristalino que provoca que las imágenes se vean borrosas o distorsionadas a todas las distancias. El astigmatismo puede causar dolores de cabeza, molestias oculares y fatiga visual, dependiendo del grado de astigmatismo.

Presbicia

Con el tiempo, el cristalino pierde su elasticidad y su capacidad para enfocar las imágenes percibidas de cerca. Las personas de cuarenta años suelen notar una reducción gradual del enfoque al leer. Entonces tienen que leer más lejos de la distancia normal. Los síntomas habituales de la presbicia son visión borrosa de cerca, dolores de cabeza, fatiga visual y dificultad para trabajar durante periodos prolongados de cerca.

Estrabismo

Se trata de una afección visual en la que los dos ojos no están correctamente alineados. En algunos casos, un ojo se fija mientras que el otro gira hacia fuera (exotropía), hacia dentro (esotropía) o verticalmente. El estrabismo suele aparecer en la primera infancia, pero a veces más tarde, dependiendo de la causa. El tratamiento puede consistir en gafas, ejercicios o, posiblemente, cirugía.

Ambliopía

Sinónimo de ojo vago, la ambliopía es una afección visual en la que la visión es reducida en uno o ambos ojos, incluso cuando se lleva corrección óptica. La ambliopía suele acompañar al estrabismo o a un defecto visual unilateral que no se ha corregido a tiempo. Las gafas y los ejercicios pueden mejorar la ambliopía.

Glaucoma

El glaucoma es una enfermedad ocular que provoca la destrucción lenta y progresiva del nervio óptico. La enfermedad puede deberse a la producción excesiva de líquido (humor acuoso) en el ojo, a un drenaje deficiente de este líquido o a un suministro insuficiente de sangre al nervio óptico como consecuencia de una presión intraocular inadecuada. Si no se diagnostica ni se trata, puede provocar ceguera.

Cataratas

Con la edad, como consecuencia de golpes, efectos secundarios de medicamentos o radiaciones (UV), el cristalino se vuelve gradualmente opaco, provocando una reducción de la visión. Las cataratas también pueden provocar halos, deslumbramientos e incomodidad al sol. El único tratamiento es la cirugía.

Degeneración macular

La mácula es la zona del ojo donde la visión es más nítida. El 25% de las personas mayores de 65 años sufren sequedad en esta zona, lo que provoca una reducción progresiva de la visión.

En raras ocasiones, pueden producirse hemorragias en la parte posterior del ojo. Las revisiones frecuentes y los comprimidos antioxidantes forman parte del tratamiento necesario, aunque la enfermedad sea incurable a largo plazo.

Moscas volantes o cuerpos flotantes

Suelen ser partículas de proteínas u otros materiales naturales que flotan en el líquido del interior del ojo. Si estas partículas son lo bastante grandes, provocan sombras y dan la impresión de que flotan delante de nuestros ojos. También se conocen como «cuerpos flotantes».

También pueden deberse a daños en el líquido ocular (el vítreo). Si van acompañadas de destellos de luz, pueden ser un signo de daño en la retina. En cualquier caso, las moscas y/o destellos deben ser objeto de un examen detallado de la retina. Consulte a su optometrista.

Consejos preventivos:

Visite regularmente a su optometrista. Con el paso de los años, sus ojos cambian y un examen oftalmológico periódico puede detectar posibles problemas antes de que se agraven. Su optometrista le aconsejará sobre la frecuencia de sus revisiones.

Utilice la corrección visual adecuada para sus actividades de ocio, deporte y trabajo. Comente sus actividades con su optometrista.

No utilice las gafas de otra persona. La graduación visual de cada persona es única.

Utilice sólo lentes de alta calidad. Las distorsiones pueden causar daños visuales.

Vídeo sobre como mejorar la visión

Vídeo sobre como mejorar la visión, del canal del:

DR LA ROSA